Algunos hombres heterosexuales tienden a evitar la estimulación del ano por tener la "creencia" de que pueden convertirse en homosexuales (y seguimos con la idea estúpida de ver las orientaciones sexuales como "maldición",moda y demas basura) o por el "que dirá" (¿Acaso tu satisfacción sexual esta basado en lo que diga la sociedad??? que pena me das SIN VIDA!).
EL ANO ES UNA ZONA ERÓGENA TANTO EN HOMBRES COMO EN MUJERES,AL MARGEN DE SUS PREFERENCIAS SEXUALES.
El Punto P esta situado en la parte inferior del recto, en aquella zona que se halla en contacto con la próstata o glándula prostatica. Dicha zona es rica en terminaciones nerviosas y muy sensible al tacto. Ademas, la estimulacion de la próstata puede producir la eyaculacion y el orgasmo masculino.
El Punto P es el equivalente en el hombre al Punto G femenino.La próstata se sitúa encima del perineo, junto al recto y debajo de la vejiga. El perineo es el musculo situado entre el ano y la base de los testículos.La función de la próstata es producir parte del líquido seminal que protege y nutre a los espermatozoides contenidos en el semen.
Como estimular el Punto P
Preparativos
Las pareja activa deberá tener limpias las manos y las uñas perfectamente cortadas. Es necesario lubricar abundantemente el ano de la pareja pasiva. Se debe usar un lubricante de base acuosa en forma de gel (que son compatibles con el látex), pues ademas sera conveniente que la pareja activa se coloque un condón en el dedo o un guante de látex en la mano. Le servirá para no ensuciarse y protegerá a ambos de cualquier posible contagio (SIDA, hepatitis, gonorrea, etc). Es aconsejable lavar bien la zona del ano antes de empezar. Para ello, se puede usar una pera de goma con la que inyectar agua en el recto para lavar las paredes internas.Relajación
Dos anillos musculares llamados esfínteres rodean el orificio anal y cada uno funciona independientemente. El esfínter externo es controlado a voluntad mediante el sistema nervioso central (como, por ejemplo, los músculos de la mano). Este esfínter se puede tensar y relajar cuando se desee. El esfínter interno es controlado por el sistema nervioso autónomo (como, por ejemplo, los latidos del corazón); refleja y responde al temor y ansiedad durante las prácticas anales. La inseguridad causara que el ano se tense automáticamente aún si la pareja pasiva está tratando de relajarse. Puede que esta necesite aprender el control voluntario sobre su esfínter interno con el fin de relajarlo a voluntad. Para ello, puede insertar regularmente el dedo en su ano (en la ducha, durante el baño diario) y sentir los músculos. Por otra parte, un baño caliente previo a las practicas sexuales aumentara el riego sanguíneo en la próstata y su sensibilidad.
Preliminares
Es importante acceder a este punto una vez el hombre esté excitado. Primero se recomienda estimular el pene. Después, masajear la zona del perineo, y a continuación estimular externamente el ano. Para excitar el ano tenemos varias opciones: besos (anofilemia o beso negro), chupetones (anilictus), cosquillas (proctotitilia) o juegos con la lengua, que pueden incluir la introducción de esta en el recto (anilingus o anilinguo).La estimulacion
A continuación se mete el dedo en el recto lentamente, haciendo masajes circulares con el fin de lograr una buena relajación e ir acostumbrando la zona a la presencia del cuerpo extraño. Una vez lograda la penetración, se masajea en forma de ascendente y descendente, haciendo una leve presión sobre la pared del ano que está por encima de los testículos, curvando el dedo hacia el interior. La próstata se identifica al tacto como un pequeño bulto del tamaño de una castaña.
Con el transcurso del tiempo, se puede probar la penetración con mas de un dedo. También se puede usar algún juguete sexual de látex y gelatina, en tanto que no son rígidos y se adaptan a las paredes del ano. La excitación del Punto P puede realizarse para acompañar otras practicas sexuales, como la felacion o la masturbación. También forma parte del pegging: sexo anal para hombres heterosexuales.
SUBIDO POR: Victoria Lillmans